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![13 de febrero.- Día Mundial de la Radio](https://static.wixstatic.com/media/4289b5_5e21461f34b949cfa61fde6708992b42~mv2.jpeg/v1/fill/w_226,h_168,fp_0.50_0.50,q_90,enc_auto/4289b5_5e21461f34b949cfa61fde6708992b42~mv2.webp)
13 de febrero.- Día Mundial de la Radio
La radio es un medio de comunicación que tiene como base el envío de señales de audio a través de ondas electromagnéticas. Su influencia...
Actualizado: 1 feb
El pasado sábado 25 de enero, Coatepec se vistió de luto al despedir a Don César Guzmán Ruiz, conocido cariñosamente como "El Tigre", un destacado promotor del arte en piel y un ícono de la tradición artesanal de la región.
A sus 88 años, Don César Guzmán dejó un legado imborrable en la comunidad, no solo por su trabajo en la talabartería "El Tigre", donde elaboró monturas y artículos de piel de alta calidad, sino también por su contribución al deporte y la cultura local.
Don César fue un ferviente amante del béisbol y la fiesta brava, actividades que reflejaban su pasión por la vida y su conexión con las tradiciones. Además, fue fundador y promotor de la Unidad Deportiva "Lic. Roberto Amorós Guiot", un espacio que ha fomentado el deporte entre los jóvenes. Su compromiso con el bienestar social se extendió más allá del deporte; era conocido por su generosidad y amabilidad hacia todos, convirtiéndose en un amigo cordial para muchos.
La talabartería "El Tigre" no solo fue un negocio, sino un símbolo de la herencia cultural de Coatepec. Don César se destacó por su habilidad para trabajar la piel, creando piezas que han sido apreciadas no solo a nivel local, sino también internacional y por figuras públicas, incluyendo a presidentes y artistas reconocidos. En su tiempo, se hicieron sillas de montar para Vicente Fernández, el Rey Juan Carlos de España y la Reina Isabel de Inglaterra, entre otros. Su obra ha dejado huella en el corazón de quienes valoran la artesanía tradicional.
La noticia de su fallecimiento generó una profunda tristeza entre los coatepecanos, quienes recuerdan a Don César no solo como un talentoso talabartero, sino también como un ser humano excepcional que dedicó su vida a enriquecer su comunidad. Su legado perdurará en cada pieza de cuero que salió de su taller y en cada rincón de Coatepec que lleva su huella.
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