Actualizado: 4 oct
En su último día como presidente de México, Andrés Manuel López Obrador firmó las reformas constitucionales que formalizan el traspaso de la Guardia Nacional a la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA) y una reforma enfocada en los derechos de los pueblos indígenas.
López Obrador destacó que la creación de la Guardia Nacional fue una de las reformas más relevantes, subrayando que esta nueva institución, con 130 mil elementos y 500 cuarteles, está diseñada para garantizar la seguridad pública del país. Según explicó, el paso de la Guardia Nacional a SEDENA busca asegurar su solidez, disciplina y honestidad, además de evitar cualquier vinculación con la delincuencia organizada o la corrupción de alto nivel.
Asimismo, el presidente señaló que la segunda reforma es un reconocimiento a las comunidades indígenas y sus derechos. Subrayó la importancia de proteger el "México profundo", asegurando que los pueblos originarios vean garantizados sus derechos y su identidad cultural.
Durante su última conferencia matutina en Palacio Nacional, acompañado por su gabinete de seguridad, agradeció a los legisladores por aprobar estas reformas, que forman parte de las 20 iniciativas que envió al Congreso durante su mandato. Ambas reformas fueron aprobadas tanto por el Congreso de la Unión como por 26 legislaturas locales, lo que permitió su promulgación en su último día de mandato.
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