Después de preparar el café y una vez que este se terminó, quedan los residuos. Algunos comentan que este grano molido ya pasado por agua caliente aún sirve, podrá utilizarse para hacerse mascarillas y tratar la piel del rostro, a su vez se dice que los asientos del café son un magnífico exfoliante natural y ayuda a combatir las ojeras, por otra parte otros afirman que estos desechos aportarán nutrientes para las plantas del jardín. Pues bueno, parece ser que hay aún beneficios que se puede sustraer a esta aromática infusión después de degustarla.
Hablando de desechos, siempre me he preguntado y creo que usted también se ha cuestionado sobre este misterioso asunto, ¿A qué se debe que el servicio de limpia pública es tan malo, informal y hace todo lo humanamente posible por convertirse en una molestia para la ciudadanía?
No se trata de una pregunta malintencionada, está fundamentada en lo que todos podemos observar en la cotidianidad, por ejemplo, recordará usted que antes pasaba el servicio dos veces a la semana (al menos en Coatepec); con la pandemia se cambio a una sola pasada a la semana. Pues bien, muchas personas se quejan que sacan la basura temprano y este servicio no atiende la calle donde viven sino hasta el siguiente día, causando que los animales callejeros la rieguen en la acera y las calles, se proliferen insectos nocivos y el evidente peste; luego, la siguiente semana los usuarios relajan la hora de sacar los desechos haciéndolo más tarde y los vecinos avisan al verlos salir con las bolsas en la mano que el camión ya pasó a las siete de la mañana.
Otro asunto digno de mencionar es el olor, este por lo regular es bastante fuerte, desagradable y se va impregnando por toda la ciudad mientras los peatones y habitantes de la colonia lo van percibiendo. Debieran tomarse providencias con este respecto, hay leyes y reglamentos que prohíben transportar carga repugnante. La noche por ejemplo es un periodo ideal en el que hay menos tráfico en las calles, el servicio de limpia pública puede ser más eficiente, trabajarían menos los empleados de esta dependencia, hay pocas personas caminando; luego menos peatones y vecinos tendrán que padecer estos aromas. Se puede afectar menos y beneficiar más.
En cuanto hace a la vialidad, hemos notado que los operarios de estos camiones son muy sensibles; si alguien les pita para que busquen orillarse adecuadamente o se apuren a realizar su labor, se enfadan y se ralentizan de modo ostensible mostrando poca empatía con los que circulan. Por la noche los operadores de la limpia pública no tendrán que sufrir la presión de nadie.
Siguiendo con el tema, hace cosa de unos días (me parece que fue el sábado 22 de enero del presente año) se pudo ver a un enorme contingente de personas en la carretera estatal número 7 Xalapa-Coatepec, a la altura de la desviación hacia la comunidad de Pacho Viejo y cerca de la entrada al libramiento, haciendo labor de limpieza, retirando maleza y basura de esta importante vialidad. Ni duda cabe que se trata de una magnífica idea, sin embargo, pienso, me parece, creo, siento que esta bondadosa campaña debió realizarse en un horario más seguro para la cuadrilla involucrada y sus automóviles, evitando la carga vehicular para no exponerse a ser atropellados en uno de los caminos con mayor incidencia de accidentes viales de nuestro estado.
Cavilemos y veamos qué pasa. Saludos.
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