top of page

Desde Teocelo - Por Angeheca



Teocelo y el país tienen una larga y amarga historia con los fenómenos naturales llamados sismos. Desde el sismo del 3 de enero de 1920 hasta los enormes sismos del 1985, 2017, 2019 y ahora el del 2021, todo ellos sentidos en Teocelo con menor intensidad, pero con la misma solidaridad con nuestros compatriotas que vivieron el evento con lamentables pérdidas humanas y económicas.


Septiembre trae muchos memes y chistes sobre dichos eventos, pues así es el mexicano, pero también nos recuerda a los seres queridos que se perdieron en ellos. Quienes no han vivido de manera directa la tragedia, poco pueden entender el dolor de una situación que se convierte en risas.


Ahora Teocelo también está en la trayectoria de huracanes, lo cual incrementa el riesgo de peligro para quienes no tienen una cultura de la prevención contra los desastres naturales. Esta cultura de prevención debería se prioridad tanto para autoridades como para ciudadanos, pues con la nueva normalidad, cada casa alberga estudiantes y es más complicado atender las posibles emergencias, sobre todo si no se actúa con prudencia y con conocimiento de causa.


Antes, se decía a las personas que en un temblor lo mejor era ponerse en los marcos de las puertas, ahora esta teoría ha sido negada y lo mejor, si no se puede salir con seguridad del inmueble a un sitio seguro, es buscar un “triángulo de la vida” en casa para evitar lesiones o muerte.


Las colonias o calles deberían tener “puntos de encuentro”, un área marcada y establecida con seguridad y señalamientos para protección de los vecinos. Conocer los riesgos que el vecino pueda implicar para uno mismo, también puede salvar vidas, como se observó hace unos días en una conocida calle de Teocelo, un techo de desplomó y gracias a la intervención del Escuadro Nacional de Rescate Teocelo, no pasó a mayores.


Los fenómenos naturales no son maldad ni castigo divino, los huracanes enfrían el planeta y esparcen semillas, los sismos han dado la forma a entorno en el que vivimos muchos millones de años antes de que existiéramos como especie, incluso los incendios son generadores de equilibrio y fortaleza para los bosques.


Lo que sí se puede hacer, son dos cosas: 1) Revertir el cambio climático y la contaminación de agua y suelos y 2) Construir una cultura de prevención que permita a la ciudadanía moverse con sincronía ante un evento de este tipo.


Teocelo carece de manuales, protocolos o cursos, donde sus ciudadanos puedan conocer o aprender lo que se puede y no se puede hacer en un desastre natural, tanto antes, como durante y después de ello.


Cuando se habla de prevención pareciera que se habla de algo lejano, de algo que va a suceder en la Ciudad de México o en otro país; lo cierto es que como sociedad no hay esa cultura que puede salvar la vida propia y de otros en un momento crucial.


En columnas pasadas hemos tocado los temas de la infraestructura de los espacios deportivos y del consumo de alcohol en los mismos. Hace pocos días que “alguien” causó daños al campo el Magueyal, la liga de football sí publicó que no se vale este acto, pero es omisa en la venta y consumo de alcohol en áreas que le compete.


Construir cultura requiere cambiar nuestra forma de ver el mundo e involucrar a todos lo ciudadanos, para mejorar y garantizar la seguridad de todos; y esto requiere sacrificios que no todos quieres realizar porque desconocen el beneficio de hacerlo.

Comments


    bottom of page