Está causando gran molestia e indignación a lectores, ciudadanos y visitantes, la colocación o pintas de propaganda política, desde luego de la 4T o Morena, cuando de acuerdo al calendario electoral, no son tiempos de campañas. Esta práctica se está realizando en diversos lugares, ya sea espacios públicos, bardas de casas abandonadas o, lo peor y grave, en escuelas públicas.
No sorprenden estas acciones ya que esta administración federal nos ha hecho vivir en campaña permanente desde que inició, al grado de darle prioridad, por encima de la grave y verdadera problemática que existe en el país.
Algunos partidos y algunos ciudadanos ya se organizan para interponer una denuncia ante el INE, ya que es una flagrante violación a la ley electoral y una burla al ciudadano pensante por querer imponer candidatos fuera de tiempo.
He ahí la importancia de contar con un órgano electoral imparcial, autónomo, justo y apegado a la ley. De ahí que se insista desde el gobierno federal el querer maniatar o al extremo de desaparecer al Instituto Nacional Electoral (INE) órgano que ha sido garante de la democracia en el país.
Ya que tocamos este tema, profundizaremos un poco más. Decidir vivir en democracia implica esfuerzos, compromisos y acciones para que este sistema de organización social y política nos ayude a vivir mejor como país; tener un esquema de contrapesos, de derechos y libertades, e instituciones sólidas que los puedan garantizar. A México le ha costado años construir esas instituciones sólidas.
Instituciones como el INE (Instituto Nacional Electoral) son de las que han permanecido a pesar de los diversos desafíos que se le han presentado, y cada vez ha mejorado más su estructura, sus resultados y su independencia de los poderes del Estado. Ahora es un referente mexicano en sistemas electorales del mundo y ha sido pieza fundamental para el avance del sistema democrático del país.
Hoy tenemos elecciones legítimas y libres; además, ha habido alternancia en el poder. A partir de nuestra transición hacia la democracia, partidos de distintas visiones e ideologías han tenido la posibilidad de trabajar por el país en múltiples cargos públicos. No ha habido control absoluto del poder y eso ha permitido hacer contrapesos a las decisiones. Hoy nuestro derecho a votar y a ser votados está garantizado. Hoy contamos con una institución cercana a los ciudadanos.
Sin embargo, durante la actual administración federal el INE ha enfrentado diversos ataques, intentos por deslegitimar su labor, acciones para reducir sus capacidades, por ejemplo, reduciéndole el presupuesto para sus labores fundamentales. El más reciente ataque es una propuesta de reforma electoral planteada desde el Ejecutivo federal, que busca cambiar al INE como lo conocemos, modificando su estructura, su función y atentando contra su independencia e imparcialidad.
Este tipo de ataques deben parar y los legisladores deben considerar que al tomar en cuenta esta propuesta pondrían en riesgo a la institución y a nuestra democracia que ha costado tanto trabajo construir.
Como ciudadanos también debemos ser contrapesos al poder y no dejar de alzar la voz en momentos como éste.
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