Durante labores de mantenimiento en la vía pública, en la esquina de las calles Zaragoza y Francisco I. Madero, en Jalcomulco, fue encontrada una olla de barro con restos óseos, que pudieran tratarse de un entierro prehispánico.
Luego de dar parte a las autoridades correspondientes y de una inspección por parte miembros del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), se determinó que se trataba de restos arqueológicos, posiblemente podrían corresponder a un entierro secundario.
Sin embargo, al llegar al lugar, el equipo del INAH ya no encontró los hallazgos, sólo las huellas. La página Arqueología- Historia y Patrimonio Cultural hizo públicas las imágenes que comprueban esto. Los lugareños indicaron que fueron miembros de la Fiscalía del Estado quienes se llevaron todos los restos. A esto, se emitió un comunicado en donde se demanda la entrega de los mismos, pero también se siembra duda, pues nadie quiso brindar datos, ni las autoridades municipales.
“Se infiere que en el nivel de desplante sobre el cual colocarán la tubería, apareció una pequeña parte del lado superior de la vasija, lo que seguramente motivó, con conocimiento de causa, que se siguiera excavando para recuperar la totalidad de la vasija, la cual pensaron contenía algún tesoro, sin embargo y a juzgar por las imágenes de la denuncia, se trata de un entierro secundario en el interior de la vasija. Hacemos un llamado para que se deje de saquear los restos de la ciudad prehispánica de Jalcomulco y castigo para los profanadores, así mismo que brinden información sobre los responsables de saqueo”, indicó el arqueólogo José Antonio Contreras Ramírez, investigador INAH Veracruz, en su comunicado.
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