Alexa Pozos
Esta comparación puede parecer absurda en estos tiempos, y espero que nadie piense que reniego de la tecnología. Pero a raíz de un reciente viaje me he planteado las diferencias entre el entretenimiento tecnológico y el tradicional para los pequeños.
En concreto, he analizado lo que se pierden los niños al estar gran parte del día frente a las pantallas en lugar de entretenerse con los juegos tradicionales que antes eran comunes. Seguro que también ganan algunas cosas, pero ese es otro tema.
Llama mucho la atención ver como la tecnología ha entrado en nuestras vidas y cómo tristemente está cambiando nuestras tradiciones. En este caso se presenta el tema de los juguetes y sobre cómo los dispositivos electrónicos han ido irrumpiendo incluso en la vida de los niños más pequeños. Ya no nos sorprende ver a un bebé jugando con el celular de sus papás. Los niños a edades más tempranas están demandando juguetes tecnológicos; cómo es el caso de los videojuegos. ¿Dónde quedaron los soldaditos? ¿Los trastecitos?
Las formas de jugar están cambiando y se está transformando la educación de los niños con la innovación de estos juguetes electrónicos.
La principal diferencia entre ambas clases de juegos es el tipo de actividad que requieren de la persona y las relaciones con los demás, de manera que, con cada tipo de juguete estamos estimulando y favoreciendo aprendizajes diferentes. En este tiempo no hay niño que no conozca ya las consolas, videojuegos, ordenadores infantiles, televisión, etc., y la mayoría los utiliza en un momento de ocio, y hasta los llegan a convertir en sus juguetes favoritos. Jugar de esa forma no implica desechar lo tradicional, porque cada actividad complementa a la otra y aporta ciertos beneficios.
Pero también las pantallas tienen algunos inconvenientes si se hace un uso excesivo o prolongado de ellas. Sobre todo, si se dejan de apreciar las inmensas posibilidades de los juegos familiares, al aire libre, etc.
Sabemos que en los últimos años pudimos observar el impacto que tuvo la pandemia afectando mucho el desarrollo de los niños y el no salir a jugar. Ese espacio lo está ocupando la tecnología.
Incluyamos más los juegos en familia.
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